miércoles, 18 de marzo de 2015

Muero de miedo

Existen muchas clases de miedos en el amor

Miedo a fallar.
Miedo a ser rechazado.
Miedo a caer en la friendzone.
Miedo a que no sea la persona correcta.
Miedo a que sea una persona prohibida.
Miedo a una nueva experiencia.
Miedo a lo desconocido.
Miedo a ser poca cosa para esa persona.
Miedo a no corresponder.
Miedo al qué dirán.
Miedo a lo que podamos sentir.
...
Pero esta vez, simplemente:
Muero de miedo de enamorarme de alguien que no sepa amar, alguien que no sepa ser sentimental.
Miedo a entregar y que esa persona no sepa sentir lo mismo aunque parezca lo contrario.
Porque no sabes lo que piensa él, porque no sabes qué significa todo lo que te demuestra que siente, si  no te lo dice. <3

Putting my defenses up, cause I don't wanna fall in love.

Encuentro de corazón

Cuando la historia se me vuelve a plasmar para ver como reacciono, para extrañarte, para retarme... te apareces reclamando, recordándome que eres tú y nadie mas.
Que nadie puede llenar tu lugar, que como tu no hay dos
Que no hay forma de querer si quiera comparar
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No sé cómo comenzar a explicar que siempre vas a ser el destino más bonito que conozco. 
Justo cuando la vida parecía que quería jugarme una broma o ponerme un plan tan similar a nuestra historia, sólo para ver si esta vez si hacía las cosas diferentes, para retarme a no regarla, o para ver simplemente como reaccionaba, me detuve a pensar que era una muy mala broma querer volver a pasar lo mismo con alguien que no eras tú, que si era cuestión de volver a vivir algo así, sólo podía ser contigo, que si así tenía que ser te pedía a ti, al único con quien la quiero vivir.

Y de repente, en cuestión de un par de días, una sonrisa al verte tan de repente fue lo que sacó mi felicidad, tan mágico, cuando nuestras miradas chocaron y supimos que el destino nos había regalado ese gran momento. Caminar y llegar a ti, tenerte a mi lado, saber de ti, que preguntes por mí. Y entonces comenzar de nuevo a recordar cómo es sentirme protegida entre tus brazos, como tú siempre tenderás tu mano para que yo no caiga, sé que no me dejas, que sin pensarlo puedes apostar por mí y yo por ti, ese momento donde todo nuestro alrededor desaparece, en el que sólo somos tú y yo, que el tiempo es complemente nuestro.
 No sabes cómo amé ese momento, que me hagas reír, pero sobretodo que no pueda calmar mi sonrisa estúpida de enamorada.
Y esa despedida que suponía no sabría a nada, que rogaba porque no fuera dolorosa, no nos iba a dejar tan fácil, tomaste mi brazo, como ese último momento de darle tu presencia a alguien y no querer dejarla, te tomé, en el fondo tampoco quería dejarte, pero necesitaba decírtelo, era importante sentirte, pero a la vez fue doloroso sentir tu partida, una vez más, porque ahí debías bajar. Porque yo debía continuar, no sé si eso se transforma en algo mas significante, en una señal de despido, no lo sé, pero no quiero dejarte, me cuesta soltarte, aunque por supuesto que me alegra verte, me cambia el día, la vida, como algo sorprendente, y aunque nos haya encantado estar juntos para demostrarnos que a pesar del tiempo siempre vamos a sentir ese lazo, que siempre vamos a que reírnos, que no hay temor más grande que el que nos creamos en las fantasías, pero que la realidad nos dice que la unión que hay entre nosotros no la deshace nadie, porque entre nosotros siempre va a quedar la ilusión, porque amo hablarte y escucharte, porque cambiarme en un instante y eso me hace feliz.
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